Con una altura de 3.330 metros sobre el nivel del mar, el Etna es el volcán más alto de Europa, pero también el más activo en el mundo, con aproximadamente 100 erupciones durante el siglo XX. Desde el volcán hay una vista impresionante del golfo de Catania. Salida en autobús hacia el Monte Etna. Ruta por la carretera panorámica que serpentea a lo largo de las montañas y por los pueblos de Giarre, Santa Venerina y Zafferana. Se subirá a una altitud de 1.950 m para descubrir la zona del cráter Silvestri cruzando un paisaje de lava de notable belleza.
Almuerzo y traslado a Taormina.
Encaramada en una terraza con vistas al mar, la ciudad encarna la belleza legendaria de Sicilia. Taormina fue descrita por Goethe como un "pedazo de paraíso" por la belleza de sus tierras. A la llegada, se puede sentir el ambiente mítico y mágico que atrapa a visitantes de todo el mundo año tras año. Taormina ha sido siempre un destino turístico, cuando pueblos como los griegos, los romanos, los bizantinos y los árabes la eligieron como lugar de residencia debido a su posición favorable y clima templado. Hoy en día, se pueden encontrar vestigios de la edad de oro de Taormina, como el espléndido teatro griego (exteriores), la Catedral de San Nicolás (siglo XIII), el Palacio Corvaia (siglo XIV - exteriores), o incluso la "Badia Vecchia" (antigua abadía - exteriores). El punto culminante de la mañana, será sin duda visitar el teatro greco-romano, con sus espectaculares vistas al monte Etna y a la bahía de Naxos. Conocido por su enorme tamaño, actualmente todavía se celebran conciertos al aire libre. Tiempo libre en el famoso Corso Umberto antes de volver al barco en Messina.
OBSERVACIONES
- Se recomienda calzado cómodo
- El orden de las visitas está sujeto a modificaciones.
- Los horarios son orientativos.